Completa tu estancia en Amsterdam visitando el Antiguo Barrio Judío
Amsterdam se encuentra plagada de multitud de rincones escondidos, plazas monumentales y barrios llenos de encanto… paseando por uno de estos barrios uno puede descubrir la riqueza y las historia de la cultura judía en el centro de Ámsterdam. El denominado Antiguo Barrio Judío o Barrio Cultural Judío.
Desde mediados del siglo XVI los Países Bajos comenzaron a albergar cada vez más a una creciente comunidad judía que se va a instalar principalmente en Amsterdam, aprovechando la relativa libertad religiosa. Convirtiendo a la capital holandesa en el centro más importante de los sefardíes de Europa occidental, llegando a ser considerada la Jerusalem holandesa. Cuatrocientos años después, Ámsterdam, disfruta en sus calles la importante influencia que la comunidad judía ha plasmado en ella durante su presencia en la ciudad. Si bien es cierto que tras la Segunda Guerra Mundial la comunidad judía de la ciudad ha decrecido considerablemente en número, no por ello el visitante deja de ser consciente de la huella patente que dejaron social y culturalmente hablando en la ciudad.
En pleno corazón de Amsterdam el viajero puede encontrar un gran numero de monumentos judíos en menos de un kilómetro cuadrado.
Maravillosas sinagogas, sorprendentes edificios o impresionantes memoriales llenan las calles del antiguo barrio judío de Amsterdam. Y en el corazón de esta zona residencial, el denominado Barrio Cultural Judío que incluye: el Museo Histórico Judío, el JHM Children’s Museum, La sinagoga Portuguesa o el Memorial Nacional del Holocausto entre otros. Paseando entre sus calle uno se puede empapar de toda la cultura, la historia y las tradiciones judías que han quedado patentes en la ciudad de Amsterdam.
Sabías que… La Sinagoga Portuguesa, varias veces al año, al atardecer enciende cientos de velas que impregnan su interior de un ambiente místico increíble. Y se realizan conciertos aprovechando la magnífica acústica del recinto. Hay que tener en cuenta que la sinagoga se conserva como se construyó en el siglo XVII, sin electricidad ni sistemas de audio.
Desde Waterlooplein, donde se encuentra el monumento a Spinoza, hasta el zoo de Amsterdam, emplazamiento del Memorial Nacional del Holocausto, y desde la zona del Hermitage de Amsterdam, ubicación de The Shadow Canal Monument, hasta el canal de Nieuwe Herengracht, donde hallaremos la impresionante Sinagoga Portuguesa, el visitante puede encontrar más de 45 puntos de interés relacionados con la cultura de la comunidad judía de la ciudad.
Desde una pequeña placa conmemorativa, colocada junto al registro civil, que representa el momento en que un grupo de la resistencia holandesa en 1943 intentó quemar el registro civil para evitar que los datos se utilizasen para deportar a los judíos a los campos de concentración durante la Segunda Guerra Mundial. Hasta la estatua de Baruch de Spinoza (1632-1677) uno de los filósofos más importantes de la historia moderna europea. Nacido en Amsterdam, en el seno de una prominente familia de judíos portugueses, fue expulsado de la comunidad judía en 1656 por sus ideas radicales y revolucionarias. La escultura, del artista Nicolás Dings, se erigió en 2008 cerca del que se supone que fue su lugar de residencia del filósofo holandés. En definitiva una espectacular colección de puntos de interés para aquellos interesados en descubrirlo todo sobre la historia judía de la capital holandesa.
En una ruta, por el barrio judío, que no le llevará más de un par de horas el viajero puede disfrutar de los diferentes puntos de interés de la zona, e incluso tiene la oportunidad, si lo desea, de visitar el interior de varios de los principales monumentos antes mencionados con un sólo ticket que se puede adquirir en la Sinagoga Portuguesa o el Museo Judío.
Autor| Dave Meler
Fuentes| Jewish Cultural Quarter
