Créditos: Nolo Arias
TULIPANES
Cuando pensamos en los Países Bajos, algo que probablemente se nos venga a la cabeza sean los tulipanes. Tal vez estemos hablando de la planta más estudiada del mundo y que un día valió su peso en oro.
Todos los años, el tercer sábado de Enero se celebra el día Nacional del Tulipán (organizado por la Asociación de Cultivadores Holandeses de Tulipanes), sirviendo éste como pistoletazo de salida para la que es, sin duda alguna, la principal atracción turística del país en primavera. En Ámsterdam se reparte esta flor flor a todo aquel que se acerque a la plaza Dam ese mismo sábado.
Durante semanas, esta misma Asociación trabaja preparando jardines y grandes campos de tulipanes para el disfrute de todos aquellos que visiten el país durante los meses de Abril y Mayo. Pero antes de citar los lugares en los que podemos observar estos increíbles campos multicolor, comentaremos un poco sobre la historia del tulipán.
ORIGEN DEL TULIPÁN
La palabra tulipán se deriva del turco tülbent, que significa ‘turbante’. La planta se designó con este nombre porque decían que la flor cerrada recordaba a este tipo de tocado.
Los tulipanes se hicieron populares en Europa en el S. XVI, y aunque en los Países Bajos enloquecieron a una nación entera, originariamente eran cultivados en el imperio Otomano (actual Turquía) y Kazajistán. Demostrando allí poder, adornaban jardines y palacios, así como los tocados de los sultanes.
Por aquella época, Holanda vivía su época de Oro y el comercio estaba al alza gracias a la Compañía Neerlandesa de las Indias Orientales. Los diplomáticos recibían tulipanes de los sultanes en sus visitas y en una de éstas, el embajador belga se los regaló a su amigo Carolus Clusius (reconocido botánico, médico y profesor en la Universidad de Leiden) para plantar en sus jardines con el fin de realizar investigaciones médicas.
Los holandeses se quedaron maravillados con la increíble gama de colores bajo un cielo gris y tanto fue así, que empezaron a desaparecer misteriosamente de los jardines de Clusius hasta que al poco tiempo, se empezaría a negociar con ellos de forma clandestina desatando una moda sin precedentes que acabaría derivando en la Tulipomanía, la primera burbuja económica y crisis financiera de la historia.
TULIPOMANÍA
Los tulipanes se convirtieron en un símbolo de estatus social, por lo que en un principio sólo las personas adineradas o de la realeza poseían estas flores que mostraban en sus jardines. Poco a poco, el resto de clases sociales también empezó a invertir entregando en muchas ocasiones propiedades y otro tipo de bienes de valor a cambio de esta flor, que se llegó a convertir en pieza de coleccionista dentro de un mercado totalmente especulativo.
Las subastas se realizaban en las tabernas neerlandesas y en ese momento se especulaba el precio de cada bulbo a partir del color y rareza de la futura flor, por lo que no se sabía con certeza como iba a ser el tulipán. Se había creado una histeria colectiva tan fuerte, que los holandeses comenzaron a comprar bulbos de plantas que todavía no habían nacido; se compraban por catálogo.
Créditos: Nolo Arias
Los precios se empezaron a desorbitar llegándose a pagar increíbles cantidades de dinero por un sólo bulbo (hasta 6.000 florines, siendo el sueldo medio anual de 150) y la demanda fue tal, que llegaron a comerciarse en la Bolsa de Valores de Holanda.
En 1636 se declaró una epidemia de peste bubónica, lo que encareció la mano de obra y los precios siguieron subiendo hasta que la burbuja estalló y consecuentemente, estos precios comenzaron a caer en picado debido a la falta de compradores y causando una gran bancarrota generalizada en la mayoría de la población. Se encontraban ante la mayor burbuja financiera de la historia, conocida como Tulipomanía.
El país se recuperó de esta gran crisis exportando las flores que lo habían llevado a la ruina. Actualmente, los Países Bajos es uno de los mayores exportadores de flores del mundo, siendo el tulipán todo un símbolo en el país a la vez que adorna cada año sus campos atrayendo a miles de viajeros.
¿EN DÓNDE PODEMOS VER TULIPANES?
Coincidiendo con el inicio de la primavera, hacia finales de Marzo una parte del país se transforma en un auténtico manto de flores de todos los colores. Primero florecen los azafranes, seguidos de los narcisos y los jacintos, para acabar dando paso a los más preciados: los tulipanes, que se siembran en otoño para que florezcan en primavera.
El jardín más popular y reconocido para admirar estas coloridas flores es Keukenhof, en Lisse (a unos 40 km de Ámsterdam). Más de 7 millones de bulbos con un total de 800 variedades de tulipanes que florecen dando entrada a la primavera
Este año Keukonhof abre sus puertas el 21 de Marzo y será posible visitarlo hasta el 19 de Mayo. El tema en su 70 edición será “Flower power” o El poder de la flores”. En este gran jardín las flores alcanzan todo su esplendor hacia finales de Abril (hasta ese momento muchos bulbos que se encuentran en el exterior no han florecido).
Créditos: Nolo Arias
Pero no sólo en Keukenhof es posible admirar estos increíbles campos. Entre Lisse y Noordwijk se encuentran la mayor parte de campos de jacintos y tulipanes, muchos de ellos al lado mismo de la carretera.Otra opción es recorrer la costa de La Haya (Den Haag) y Leiden hasta Alkmaar, en el norte.
También es posible visitar FloraHolland, la subasta de flores más grande del mundo que se encuentra en Aalsmeer (los fines de semana no abre al público).
Definitivamente, si viajas en el mes de Abril a Ámsterdam, es imposible no ver tulipanes a tu alrededor y la visita a estos campos es parada obligatoria.
BIBLIOGRAFÍA | dw.com, holidayguru.es, cassiopeiaviajeros.wordpress.com, hogarmania.com, holland.com, bollenstreek.nl
IMAGENES | Nolo Arias
